viernes, 19 de junio de 2009

¿Nos hacemos unas pajillas?



Hoy vengo a hablar de la masturbación, eso que hacéis todos menos yo, y de su relación hormonal con Internex (más conocido como Internet). Y es que hoy me he dado cuenta de que nací en el momento histórico equivocado.

Cuando un servidor era adolescente no había Internet. Y claro, yo ahora, que inocentemente tecleo "bizcocho" y me salen doscientas mil entradas de tías en bolas, relacionando tan grato postre con expresiones tales como "bizcochitos calientes", "quiero comerte el bizcochito" o "El día que el bizco encontró un chocho rasuradito", pues ME INDIGNO, porque cuando yo estaba en la pubertad y tenía las hormonas desatadas y parecía un mono viudo NO TENÍA LOS RECURSOS QUE TIENEN LOS PUTOS NIÑOS ESTOS HOY DÍA. ¡¡¡¡Y eso no es justo!!! Yo jugaba al Spectrum, con jueguecitos en los que el protagonista era un palito con patas, y ellos ahora tienen unos gráficos que te cagas, con mundos en tres dimensiones, sonido ultrasorrounded o lo que cojones sea y Lara Croft. Vale, eso lo acepto. Pero lo que no acepto, de ninguna de las maneras, es que ellos tengan ahí tantas mujeres desnudas ¡¡¡cuando uno tenía que comprarse el Marca pa esconder la revista entre las páginas!!!! Que mira que odio el Marca, ¿eh? Pero claro, todavía no había tampoco el Estadio Deportivo -diario que, a la postre, también acabé odiando porque trabajé para él y vaya cómo me explotaron a una miseria de sueldo-. Pero bueno, ese no es el tema.

Y digo yo. ¿Vosotros, llegado el caso de ser invitados a una casa donde tienen a un adolescente, os sentaríais en la silla del ordenador? PORQUE YO NO. Si esos chiquillos a esas edades están todo el día dándole a la zambomba, la virgen. La de cosas que habrá visto y sentido ese asiento. No, no. Yo tecleo de pie y con guantes. Ya se comenta por ahí que hay púberes que están intentado convencer a los padres de que pongan cerrojo en el cuarto del ordenador bajo la excusa de que les da vergüenza que les sorprendan jugando al Fifa. Al Fifa, sí. Al fifa, fifa, fifa, fifa, a eso es a lo que tú juegas (entiéndase esto último como construcción onomatopéyica).

En fin, que los niñatos estos, todo el día quejándose, todo el día que si soy un desgraciao, que mi vida no tiene sentido, que si no sé qué, que si no sé cuánto... Y no saben lo que hemos sufrido otros para atravesar el desierto hormonal ese que están atravesando ellos ahora. Ay, si los cuartos de baño de los años ochenta hablaran...

5 comentarios:

El especialista escapista dijo...

Esto del internete ha cambiado muchas cosas, parte del misterio. Los chavales de hoy están a un click de muñecaschochonas.com

¡Lo que teníamos que hacer antes para conseguir una revista guarrilla!

Abrazos master!!!

Anónimo dijo...

Uuuf desde que pornhub entro en mi vida...todo tiene otro color...

Nunca lo agradecere lo suficiente...

Toda mi empatia sr, pero sinceramente nosotras no hemos tenido problema alguno nunca...
Emulando a Quevedo: Erase una ducha a un chorro pegada...

MariFe

Tytyvillus dijo...

Carlitos, ¿qué vas a dejar para cuando seas viejo? Te quejas más que una vieja solterona. En mis tiempos......eres el abuelo cebolleta.

|[Silence]| dijo...

Jajajajajajajaja
madre mia xD

Malorie Knox dijo...

Joder tío que yo en los ochenta compartía el baño contigo... Hay más sitios que no se comparten con una hermana pa eso, sabes????

XDDD la madre que te parió