
Odio el machismo. No me gustan los machistas ni las machistas, que haberlas haylas -y tengo la teoría de que una mujer machista suele ser más machista que un hombre machista-, pero es que... es que vaya cojones tenemos. Ofú, qué machos somos. Ofú, si es que no se puede con tanta gallardía, compostura, tanto saber estar, tanto señorío, tanta masculinidad, tanto porte... Somos tíos y punto, pero no tíos de hermanos de tu padre, no; tíos de TÍOS, de tiarrones, de "vamos a mancharnos los morros de cerveza y los dedos de jamón", de "vamos a ver el fútbol mientras nos rascamos los huevos sin importarnos si alguien mira". Para algo los tenemos, no sólo para que cuelguen, coño. Hoy siento un arranque de orgullo macho que me sale por las orejas, qué queréis que os diga. Hoy me alegro el doble que de costumbre de poder mear de pie y a distancia, de poder apuntar y decidir dónde YO quiero que caiga el chorrillo. Porque SOMOS HOMBRES, y pa nosotros se queda. La hostia, joder.
¿Queréis saber por qué?
Porque hoy me he levantado con una de esas noticias que te alegran el día, que te hacen sentirte henchido todo tú de tener pito. SÍ, SEÑOR. Atención, hombres que leéis mi blog (u hombre que lees mi blog; o mujer que conoces a hombres que de tener un mínimo interés leerían mi blog), que esto es para montar una fiesta nacional: un estudio científico en Montreal ha tenido que ser suspendido porque SOMOS MUY MACHOS. Sí, sí, como suena. Los científicos pretendían reclutar en dos grupos apartados a hombres que consumieran porno y hombres que no lo hicieran para realizar un estudio sobre sexualidad.
¡¡¡Y no ha podido ser!!! ¡¡¡Porque somos muy machos!!!! ¡¡¡¡Porque a nosotros, tonterías, LAS MÍNIMAS, coño!!!!
No han podido encontrar a ni un solo hombre que no consumiese porno jamás. ¡¡¡¡Ala!!!! ¿¿¿¿Son eso cojones o no son eso cojones???? NI-U-NO-SO-LO. Simon Louis, catedrático que dirigía el estudio, ha declarado que este tenía como fin observar el impacto de la pornografía en la sexualidad de los varones y como forma de percepción que tienen sobre hombres y mujeres. Y, mira tú, no han podido.
La verdad es que vaya estupideces que se les ocurren, coño. El impacto de la pornografía... ¿Qué impacto ni que impacto, hombre? Yo veo porno todos los días y a todas horas y, mira, como si nada, tan normal. Hombre ya.
Aunque la verdad es que... el otro día me extañó mucho que mi vecina no me dijera que qué cocina más mona tengo y que si no quería que me demostrara lo mucho que le gustaba. Y fui a una entrevista de trabajo y la entrevistadora no me preguntó qué estaba dispuesto a hacer para conseguir el puesto mientras me desanudaba la corbata... Y la cajera del supermercado no acarició sus pezoncillos con los guisantes congelados... ¿Ves? El raro no soy yo, coño, son los demás...
¡¡¡VIVA EL PORNO!!!
5 comentarios:
Tío, que tú te comes el cruasán a PELLIZQUITOS....Tú muy macho no eres....Si te gusta Chuck Norris...
jajajajaja
aun no entiendo yo porque por ver porno uno es muy macho eh!!!
porque ahí están los gay, que hay algunos machos si...pero otros que no lo son,que por mucha porno que vean, si ven una cucaracha se suben al techo, así que no se yo si influye.
pero bueno yo no discuto tu masculinidad y tu machotismo (creo que no existe, yo en mi racha )
lo que me puedo reír contigo por dios....
TYTYVILLUS: lo de que me como el cruasán a pellizquitos no te lo voy a negar; pero Chuck Norris no me gusta, digo que me gusta porque le tengo miedo, que es diferente.
SARA: vas a tener que hablar con TYTYVILLUS, que sí duda de mi masculinidad, cosa que no entiendo. VER PORNO ES DE MACHO, y ya está. No tiene explicación, como muchas cosas que no la tienen. Guapa!
Jajajajaja, es que solo a un tío se le ocurre hacer eso.
Triste es que hagan esos estudios...
Por cierto, ¿¿hay alguna razón por la que en todos los blogs del planeta (incluyendo, por supuesto, el mío) se hable del gran Chuck Norris a todas horas??
Publicar un comentario