sábado, 25 de abril de 2009

Desobediencia moral

Hay veces en la vida en que te ves moralmente obligado a desobedecer al doctor. Porque sí, porque cuando canto me invierno si entonces hizo frío, me enrosco si ya estaba desenroscado y mis arrugas se difuminan para suavizar lo que se secó con el paso del tiempo. Porque cuando canto vuelo, y no dejarme cantar se llama obstrucción a la libre circulación de ideas y emociones, en base a la cual me he permitido, por una vez y sin que sirva de precedente -espero-, la desobediencia moral de dejar escapar un poco del aire que me oprime por dentro; me he armado con mi guitarra, he carraspeado unos segundos, le he dado al record y ha salido esto...

Que la otorrinolaringología me perdone...



Al respirar, de Vetusta morla



El día cero del día después, by Carlos Corso

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me recuerda mucho a Héroes del Silencio.
Saludos.