martes, 10 de mayo de 2011

Si eres murciano, conduce.


¡¡¡¡Hic!!!!

Si en entradas anteriores declaré mi absoluto fanatismo hacia los habitantes de Iowa, me veo en la obligación de manifestar que yo, chaquetero que soy desde muy pequeño -¡¡visca el Barça!!-, he decidido traspasar mis amores más profundos -no sexuados- y otorgárselos, sin ningún lugar a dudas y con toda la firmeza que vuesas mercedes puedan imaginar -hasta que venga un bruto mayor que me enamore-, a nuestros amigos los murcianos.

Pero detengámonos un momento a reflexionar sobre los murcianos. Porque... ¿quién piensa en Murcia a lo largo del día? Sí, los murcianos piensan mucho en Murcia, más que nada porque están allí, vale, y es muy difícil abstraerse cuando estás en Murcia de que estás pisando Murcia, respirando Murcia, etc, etc. Pero... aparte de los murcianos, ¿quién piensa en Murcia? Yo no me levanto por la mañana y digo: "Aaaaay, Murcia". Bueno, vale, ahora sí, porque la amo profundamente a raíz de la noticia que hoy traigo a mi amado blog y ahora soy de murcia como el que más -¡¡¡que nadie me toque Murcia que yo por Murcia mato!!! ¡¡¡Ma-to!!!-. Pero... aparte de los murcianos y de mí, que amo a Murcia profundamente desde hoy, ¿quién piensa en Murcia? La respuesta es NADIE. Lo siento, es así. Es una comunidad un poco... no quiero decir nada que hiera, pero, joder, todos los días se habla de Madrid, de Cataluña, hasta de Andalucía -sobre todo si hay que contar un chiste o hablar de vagos-, pero... ¿de Murcia? "Los M-clan son de Murcia". "Sí, vale, pero dale al play, dale al play". Y ya está. Como si que los M-clan fueran de Murcia importara un carajo. Pero es que es así. A nadie le importa Murcia. (Un beso para todos los murcianos).

Que, por cierto, me acabo de dar cuenta de que si repites Murcia muchas veces, el nombre en sí acaba resultando un poco absurdo. Vaya, lo que les faltaba a los murcianos ya. ¡Que hasta el nombre quede feo!

Si unimos "juez", "borracho" y "Murcia", tenemos historia estupenda que hace que mi blog recupere la respiración después de casi cinco meses. Sí, amigos, sabéis que me gustan los borrachos, y sabéis que no me gustan los jueces; así que, cuando he visto esta noticia, todo mi ser ha palpitado como masa viscosa que encierra un bicho monstruoso en película de serie-b estadounidense de terror y me ha impulsado a lanzarme al teclado de mi nuevo ordenador portátil desde el que os escribe os escribe (pensadlo bien; esta frase no es agramatical).

Murcia, año 2011. Chaval borracho al volante divisa control policial y decide obtener minipunto, punto y retirada del carné. Pisa el acelerador y evade dicho control, pero la policía no es tonta (...), y persigue al chaval beodo y murciano. Con gran pericia le alcanza, le detiene y le realiza la prueba de alcoholemia, en la que nuestro Paquirrín particular obtiene un meritorio 0'45 (po a vé si te enrolla y me pone un sinco). "Uuuuuuh", piensan los murcianos. "¡Cárcel segura!". Pues no. O sea, en un principio le condenan, aunque no a cárcel, sí a servicios comunitarios -amén de retirarle el carné de conducir-. Pero hete aquí, que, como diría aquel, los murcianos también recurren; y el chaval recurre, recurre. Y yo creo que ni Zapatero puesto hasta arriba de gominolas, con todo su optimismo, habría esperado el resultado que obtiene Paquirrín tras el recurso: ¡¡¡es absuelto!!! "Pero, ¿cómo?!, dirá el lector. "¿No es que los jueces son justos y equilibrados en sus sentencias?".

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(Cri, cri. Cri, cri. Cri, cri).


Atjo, atjo.






Pues eso. Que resulta que los magistrados deciden que el chaval se escapó tan bien y sus maniobras fueron tan buenas, que es imposible que estuviera borracho, que viva Murcia y vivan los machotes, y que si el niño dio 0'45 es tan macho que ni eso le emborracha y a chuparla la primera setencia.

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡BRAVO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Justicia española. Doce meses, doce burradas (o más).

1 comentario:

dgoiko dijo...

Dicen que el primer murciano era hijo de una puta y de un gitano, supongo que esto lo confirma, o, almenos, aporta otro argumento mas para los defensores de dicha tesis